La vida no es la que uno vivió, sino la que uno recuerda y cómo la recuerda para contarla.
Gabriel José de la Concordia García Márquez
Se nos ha ido un inmortal de las letras. El que pintó con gran maestría el realismo subyacente en el imaginario latinoamericano, que rescató el encanto del sopor tropical, de los personajes que divagan entre la fantasía y la realidad, de la relatividad del tiempo y de los cuentos de fantasmas de antaño. El que nos transportó con la magia de la palabra a los recónditos sitios inexistentes y nos embriagó con su apasionante prosa.
También el que navegó en las aguas cinematográficas, junto a Arturo Ripstein, Roberto Gavaldón, Miguel Littín, Tomás Gutiérrez Alea y Akira Kurosawa, entre otros. Presidente de la Fundación del Nuevo Cine Latinoamericano y fundador de la Escuela Internacional del Cine y TV. El séptimo arte también le debe a este prolífico heredero de Cervantes.
Fragmento final del discurso de aceptación del premio Nóbel (subrayado mío):
En cada línea que escribo trato siempre, con mayor o menor fortuna, de invocar los espíritus esquivos de la poesía, y trato de dejar en cada palabra el testimonio de mi devoción por sus virtudes de adivinación, y por su permanente victoria contra los sordos poderes de la muerte. El premio que acabo de recibir lo entiendo, con toda humildad, como la consoladora revelación de que mi intento no ha sido en vano. Es por eso que invito a todos ustedes a brindar por lo que un gran poeta de nuestras Américas, Luis Cardoza y Aragón, ha definido como la única prueba concreta de la existencia del hombre: la poesía. Muchas gracias.
Gracias a ti, Gabo.
GGM En el Centro Virtual Cervantes
En Literatura.us
En Wikipedia
En el website del Premio Nóbel
En el website de la Fundación para el Nuevo Periodismo Iberoamericano
Discurso de aceptación del premio Nóbel
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